Don José Saramago partió a la eternidad, era un señor sencillo, con un vocabulario y un estilo muy particular en sus libros. La primera vez que escuché algo de él fue cuando le dieron el Premio Nobel de Literatura y su singular estilo de expresar sus ideas por medio de las letras han causado que el mundo le pusiera atención.
Todavía me acuerdo aquella fiesta que tuvimos con él en el Teatro Nacional, era un sábado por la tarde y mi Universidad (U.N.A) le entregaba el Doctorado "Honoris Causa", yo era el Secretario de Divulgación de la FEUNA y acaba asumir esas funciones cuando me invitaron a tan magno evento.
Don Jose nos trató con la humildad de un hombre universal y siempre nos apoyó en la lucha contra el TLC, muy agradecido con la condecoración de mi "U" y se identificó fácilmente con el movimiento estudiantil, todavía recuerdo aquel: "¡¡¡No queremos, no nos da la gana, ser una colonia, norteamericana!!!, No al TLC", Don Jose siempre sonreía y nos apoyaba, siempre en favor de las causas sociales y el humanismo como una temática imprescindible dentro del "ser".
Por cierto hace poco me había comprado su libro "El evangelio según Jesucristo", en mis ratos libres dialogo con él y su sarcasmo tan rico... será por eso que me identifico con él, ahora cada letra que mis ojos perciban será una conversación directa con este hombre.
Don Jose, gracias por enseñarnos tantas cosas, hasta pronto!!