Estos días me he puesto un poco a recordar mis tiempos de formación colegial, cuando ingresé al Conservatorio de Castella a estudiar arte, tenía 12 años. Me gradué de sexto grado a los 11 años en la Escuela Central de Sto Domingo (hoy Felix Arcadio Montero), hice pruebas de aptitud para entrar al Castella en sétimo y ahí ingresé.
En ese entonces era un preadolescente con mucha curiosidad por el arte, que siempre fue mi gran pasión y comenzaba a dar mis primeros pasos de baile en expresión Corporal, mis primeros dibujos y también comencé a solfear y tocar flauta dulce y participé en mis primeras presentaciones de teatro, en el Castella en sétimo, octavo y noveño año había que hacerle a todo lo que fuera arte.
Gracias a mi maestro Manuel Vargas (que me puso una tarea en el cole), me puse a investigar y conocí a Rembrandt, Andrea Mantegna y Fran Angélico. En Rembrandt conocí su pintura, las composiciones que realizaba en sus obras, su riqueza en el claroscuro y pincelada; además de que se representó así mismo y su estudio del pasar del tiempo y estados de ánimo. En esta imagen me impresiona la composición que logra con el ritmo de las "cabezas" de los aprendientes del Dr, el escorzo del cadáver que da cierta profundidad en la escena y la mirada del Dr explicando su lección de anatomía. En el arte Holandés me encanta que siempre representaron el trabajo como algo digno de plasmar en una pintura, destacar el trabajo como importante en la comunidad holandesa.
En el caso de Andrea Mantegna su escorzo magistral en "el Cristo Muerto" (de hecho practiqué montones en mi clase de dibujo en la UNA, mi academia de arte universitaria), otra cosa fue la expresión de los rostros religiosos que retrataba y a pesar que trabajaba con paleta restringida, el montón de matices que sacaba de cada color. Mantegna representa a un Jesús humano, no un Dios, sino en una actividad humana que es la muerte y su cuerpo yaciente nos refleja no la Divinidad del crucificado, sino su humanidad, exaltado por las mujeres a su izquierda con otra acción humana: llorar.
Cristo Muerto. (Andrea Mantegna).
Fran Angelico como el artista mas religioso del renacimiento italiano, su colorido y exquisita composición en los cuadroplanos. El como plasma su pensamiento teológico como fraile y lo lleva a su pintura, cada detalle en sus trabajos refleja su cosmovisión y su mundo renancentista, las escenas las plasma en un ambiente terrenal, no divino, sin embargo, los personajes principales mantienen el "hieratismo divino" que en etapas anteriores al arte europeo representaban a las deidades. María con una expresión de "hágase tu voluntad" y el ángel levemente inclinado, como haciendo reverencia a la "llena eres de gracia, el Señor esté contigo" y una cosa interesante: a la izquierda de los personajes principales se observan otros mas "humanos" que ni siquiera vuelven a ver la escena principal del encuentro con el ángel, me recuerda el jardín del Edén...
La anunciación. (Fra Angélico).
En mis obras artísticas no seguí esta línea, pero marcaron mi formación profesional.